¿Has encontrado tu cielo personal? El Rey Mago encontró la perla de gran valor – su cielo personal, cuando vió al Niño Jesús.

Este articulo y poema del Rey Mago fue publicado para la Navidad de 2018. Desde entonces, la letra de la canción ha adquirido una nueva vida. El compositor, Peter Link, puso música y cantante, Julia Wade, interpretó la letra.

Todos aman la historia de los Reyes Magos y cuando Julia empezó a grabarlo, imaginó que ella fue la protagonista, viviendo el viaje del Rey Mago. ¿Una Reina Maga? ¡Tal vez!

¡Tu puedes decidir!

Cualquiera que sea, no es muy difícil imaginar el fervor del Mago. Todos los que están buscando el Cristo con una vida mejor, han experimentado el mismo anhelo.

Entonces, imaginémonos. Imaginemos que nuestro sabio favorito de los tres estudió diligentemente los escritos de los profetas que predijeron la llegada de un salvador. Él, tal vez, estaba totalmente comprometido en la búsqueda de las señales que se revelarían cuándo y dónde vendría este salvador. Ok, así que probablemente estudió los cielos cada noche y día, años antes de aquella noche maravillosa, registrando meticulosamente los dibujos de los planetas y las estrellas. Era como si estuviera buscando un vistazo de Dios a través de una ventana al cielo. Finalmente, llegó el día!

¡La señal que había estado buscando, la estrella de Belén, apareció!

El hombre sabio saltó de alegría y celebró, e inmediatamente comenzó a prepararse para su viaje a ver este maravilloso regalo. Estaba dispuesto a dejarlo todo: su carrera, su familia y todas las comodidades del hogar, en busca de su salvador.

La esperanza de nuestro hombre sabio se convirtió rápidamente en su escudo mientras viajaba a través del mar del ridículo y las críticas de amigos, familiares y conocidos. Ya entendió que aquellos que se burlaban más escondían un deseo secreto de ver el salvador llegar al mundo. Al fondo, todos deseaban una vida mejor.

La esperanza del hombre sabio ha sido un regalo precioso para el mundo. Este regalo sigue bendiciendo a la humanidad hoy en día.

Y así, el hombre sabio, me imagino, comenzó un viaje que continuó durante varios meses. Cualquiera que haya viajado o haya emigrado, sabe los desafíos que puede traer el viaje. El hombre sabio recorría desiertos, montañas, colinas e incluso agua, acompañado de su camello.

Llegando a una parte difícil del viaje, el sabio, cansado, pidió una señal de los cielos con la única esperanza de encontrar la dirección correcta. Podemos imaginar que el miedo puede haberlo llevado a detenerse o a buscar una fuente material para orientarse. Pero, afortunadamente, volvió su mirada hacia arriba y la estrella, tal vez incluso más brillante que antes, la guió alegremente en la dirección correcta.

Fue un viaje largo y difícil, pero un poder más grande que las dificultades que se le impusieron a venir y contemplar al hijo de Dios. Finalmente, la estrella detuvo su viaje y el hombre sabio subió la última colina con una gran emoción. Estamos imaginando que anticipó el castillo de un Rey rodeado por una ciudad dorada, pero al llegar a la cima de la colina, observó el humilde lugar de nacimiento del hijo de Dios.

El cielo en sus ojos
(el hombre sabio)
letra por Dora Redman
música por Peter Link
contado poer Julia Wade

La estrella flotaba sobre un establo.
Y la luz de la estrella iluminó el espacio.
Me quedé parado a una distancia
Por encima de este lugar manso y humilde
Esto no era lo que esperaba encontrar
Y me preguntaba por qué el salvador de la humanidad.
Llegaría al mundo de esta manera tan humilde.
Sólo acostado en una simple cama de paja

Pero vi el cielo en sus ojos.
No parecía estar tan lejos
Por encima de la luna y las estrellas
Con puertas de perlas y calles de oro.
Y todas las otras cosas maravillosas que me han contado
Pero para mi fue una gran sorpresa
Encontrar que el cielo está dentro
Es un hogar dentro de mi corazón donde siempre he estado
Y lo llevo conmigo
Sí, lo llevo conmigo a todos lados.
Encontré el cielo
Cuando vi el cielo en sus ojos.

Así que me quedé justo allí antes del pesebre
Con una paz y tranquilidad inmenso.
Aunque me llamen un hombre sabio
Estaba demasiado conmovido para expresarlo con palabras
La anticipación me llevó a mis rodillas.
Y los momentos más dulces me llenaron de tanta facilidad.
Y levanté mi percepción para que pudiera ver.
Cuando el niño Jesús en el deleite me miró

Sí, vi el cielo en sus ojos.
No parecía estar tan lejos
Por encima de la luna y las estrellas
Con puertas de perlas y calles de oro.
Y todas las otras cosas maravillosas que me han contado
Pero para mi fue una gran sorpresa
Encontrar que el cielo está dentro
Es un hogar dentro de mi corazón donde siempre he estado
Y lo llevo conmigo
Sí, lo llevo conmigo a todos lados.
Encontré el cielo
Cuando vi el cielo en sus ojos.
Cuando vi el cielo en sus ojos.

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